MAMITIS

MAMITIS.
Mi mama me mima.
Que lindo y hasta rima!!!

No es tan lindo cuando tu hombre peludo no solo dice la frase, la piensa 24/7.

Todos mis novios han tenido mamitis. De hecho todos, han tenido el patrón de vivir con su mamá desde que son pequeños, (sin el papa merodeando) y se convirtieron en el nuevo esposo.

Hace mucho salí con un hombre guapo, grande y fuerte. Mi típico vikingo. Tengo una obsesión severa con hombres que parezcan nórdicos.

Un día, después de salir varias semanas juntos, me lleva a su casa. El hombre casi treintañero vivía con su madre todavía, claro está. Estas generaciones no se porque salieron así de defectuosos. De no quererse salir de su casa así pasara la mujer mas guapa y millonaria y les ofreciera todo no dejan a sus mamis… PASE LO QUE PASE.

En fin, su mamá no estaba. Estaba de viaje.

Todos los cuadros, no miento, todos… eran de ellos dos.

Pero hay uno en particular que me llamó la atención. Mi hermoso hombre alto bailando con una mujer tango. Al principio me dieron unos celos inmensos, después me acerque a ver la foto. No, no era cierto… tenía cuerpo de chava pero cara de señora, había algo más de FUCKING miedo que eso??????!!!!!

Le pregunté, ya… en vivo y en directo que demonios era eso…
Me contestó súper tranquilo:
–          Es un viaje que hice con varios familiares pero mi mama no pudo ir.-
Todavía se atrevió a hacer puchero el desgraciado mimado.
–          Entonces cuando regrese de regalo le hice esta foto photoshopeada. No sabes su cara cuando se la di… Se murió de la emoción!-
Era claro que la susodicha no se MURIO, ni de la emoción ni de la edad ni de nada… seguía vivita y coleando… y por lo visto hasta bailando tango.
Si, esto era una película de hitchcock, psicosis para ser exactos.
Y como toda heroína de película de terror decidí quedarme. Llevaba meses de sequía y me hacía falta un poco de amor. Así viniera del tipo más raro.
Empezamos a besarnos y paso lo que tenia que pasar. La fecundación… con condón claro.
Cuando terminamos, me tape con una mantita que tenia en mis pies.
El hombre me vio de la forma más extraña. Me quito la manta y me dijo:
–          Esta manta me la hizo mi mama cuando era niño. Te voy a pedir que no la vuelvas a tocar.
Era demasiado y mi misión estaba cumplida. Tome mis cosas y me retiré, no sin antes tirar “sin querer” su foto bailando tango.
Pero ellos no tienen la culpa, definitivamente son las mamás. Ellas son las culpables de esta película que cada vez tiene más infectados cual zombies.

Las mamas, si lo pensamos bien, son las que los tienen en extremos consentidos, les hacen de comer lo que mas les gusta, les lavan y planchan, los apapachan, se levantan en la mañana a hacerles el desayuno… ¿Cómo vamos a competir las mujeres de ahora con señoras así de buenas?

Una vez me tocó una suegra que se acostaba con mi ex novio cuando tenía miedo o se sentía enferma. Les juro no miento. Habíamos tres en la relación. Y ella creo q era mejor en la cama que yo.

Pero no lo hacen con bondad estas lindas señoras. Nos ven con desaprobación cada vez que hacemos llorar a su bebe. Así que hacen hasta lo imposible por hacernos quedar mal.

Como si ser soltera no fuera difícil y cuando ya por fin tienes a una presa, aparece su protectora madre para defenderlo de tus negras intenciones.

Hay suegras buenas. También he tenido. Una. Me enseñó muchas cosas. Lo contradictorio?? Es la madre de mi ex, al que va dedicado el articulo “dependerja”. Como una madre tan buena pudo dar a luz a alguien así de ruin. En fin…
Ale llego el otro día diciéndome que pobre de su nuevo galán, había quedado huérfano a los ocho años.
Yo solo sonreí por dentro… “afortunada maldita.”

Al hombre que dormía con su madre yo siempre le cantaba la siguiente canción…

“Eres casi el hombre perfecto
el que yo imaginé en mi sueños
de los que rara vez se pueden ver
debiste nacer en año bisiesto.

Tú serías el hombre perfecto,
pero solo tienes un defecto….
QUE NO ERES HUEEEEERFANO…. “

Mamitis. Si tu hombre lo tiene solo puedes hacer dos cosas: Competir o huir.
Así que huye lejos Mimosa. HUYE.